El asesinato que conmocionó al departamento de Nariño: tres niñas de 13, 14 y 15 años, ya estaba por resolverse cuando el principal sospecho de cometer el crimen fue encontrado muerto en parecidas circunstancias a sus víctimas.
La Fiscalía lo tenía identificado y la Policía ofrecía una recompensa de hasta $30 millones por su ubicación. No fue suficiente para quienes al parecer conocían de su secreto criminal, lo encontraron primero, lo amarraron, asesinaron y dejaron en el mismo lugar donde fueron abandonados los cuerpos de las menores, el puerto de Tumaco.
Ahora la investigación de la Fiscalía a punta a los responsables de asesinar al supuesto victimario. Se trata de acuerdo a las primeras hipótesis de una organización criminal que controla el tráfico de drogas en esa zona del departamento de Nariño y que aseguró a la comunidad hacer justicia en contra de quien fue señalado de asesinar a las menores, así no estuviera plenamente probada su responsabilidad.
Los cuerpos de Paula Campáz Cortez, Ximena Arboleda Rosero y Yurani Preciado fueron encontrados el pasado mes de junio en un manglar a tan solo 20 minutos del casco urbano de Tumaco.
La ciudadanía tumaqueña no sale del asombro, luego que el pasado sábado fueran encontrados los cuerpos sin vida de tres jóvenes, quienes fueron reportadas como desaparecidas desde hace cuatro días.
Las víctimas corresponden Paula Campaz Cortez, de 14 años de edad, residente en el barrio Viento Libre; Ximena Arboleda Rosero, quien el día de ayer cumplía 14 años de edad y vivía en el sector de Puente Las Flórez; y Yurani Preciado, de 16 años de edad, la cual había llegado de Cali hace unos seis meses y se radicó en el barrio Barrancón, a la cual sus amigas le decían cariñosamente ‘La Sexi’.
Los hechos
Según se pudo establecer, las tres jóvenes se habían retirado del colegio y se dedicaban a laborar en oficios varios y desde el miércoles 22 de junio fueron reportadas como desaparecidas.
Sin embargo, un joven que se dedica a la recolección de piangua, en zona palafítica en el sector de El Pindo, en el barrio Once de Noviembre, a unos 20 minutos del centro de Tumaco y donde hay presencia de abundantes manglares, fue quien en horas de la mañana del sábado divisó los cuerpos de las tres jóvenes que yacían sobre unas raíces.
De inmediato fueron alertadas las autoridades sobre el hecho, quienes llegaron a constatar lo que pasaba. De igual forma, familiares de las tres jóvenes quienes buscaban a sus seres queridos, llegaron hasta las instalaciones de Medicina Legal de Tumaco y reconocieron los cadáveres.
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