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En los días de 18 y 19 de noviembre de 2025, las disidencias de las FARC, específicamente del Estado Mayor Central (EMC) bajo el mando de Néstor Gregorio Vera Fernández alias “Iván Mordisco” con los Frentes Jaime Martínez y Dagoberto Ramos, han perpetrado una intensa arremetida violenta en varios municipios del Cauca, incluyendo Jambaló, Corinto, Caldono, Toribío, Caloto, Miranda,Padilla y Silvia.
Los ataques han sido coordinados y simultáneos contra varias estaciones de Policía en el norte del Cauca, mediante el uso de drones y explosivos: Los subversivos han empleado ráfagas de fusil, explosivos y, de manera notable, drones para lanzar cargas explosivas, como ocurrió en Jambaló y Mondomo recientemente.
En un hecho inusual, los disidentes anunciaron sus ataques con megáfonos en Jambaló, pidiendo a la población civil que se resguardara antes de iniciar los hostigamientos, generando pánico y zozobra en la comunidad.
En esta población Nortecaucana siete uniformados y un civil, que es menor de edad, resultaron heridos en medio del hostigamiento a la estación de Policía, resultando además varias viviendas afectadas– sus habitantes vivieron verdaderos momentos de pánico, por lo que se les pidió resguardarse en sus hogares y evitar el desplazamiento, sobre todo, en zonas rurales y en vías de acceso.
La escalada de violencia en el Cauca ha venido provocado confinamientos, desplazamientos y la suspensión de actividades cotidianas y educativas en las zonas alteradas, afectando gravemente a comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas, lo que alimenta el paso hacia una nueva crisis humanitaria en otro ciclo que se repite en el Cauca, en donde los grupos al margen de la ley, bandas criminales, guerrilleros y pandillas juveniles, ganan cada vez más dominio en los territorios.
Ante este sombrío panorama de inseguridad y avance de la criminalidad en el Cauca , el Ejército Nacional ,la Policía y la Fiscalía General de la Nación han desplegado tropas y todas sus capacidades investigativas para intentar retomar el control de las áreas afectadas y judicializar los actores violentos.
En tanto las autoridades regionales y locales, siguen exigido el respaldo urgente del gobierno central para hacer frente a la grave situación de seguridad, así como desde los distintos sectores de opinión, organizaciones sociales, empresarios y políticos, opinan que estos hechos hacen parte de la fracasada “Política de la Paz Total” con la que se empoderaron en la región los grupos insurgentes.
Desde la Gobernación del Cauca el mandatario seccional de los caucanos Jorge Octavio Guzmán Gutiérrez ha pedido al presidente Gustavo Petro Urrego contemplar la posibilidad de ordenar bombardeos a los campamentos de las disidencias en el territorio caucano, así como militarizar totalmente la carretera Panamericana para poderle brindar seguridad a los usuarios de la misma, hoy en poder de los grupos delincuenciales e insurgentes.
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