6784 vistas.
Con más de 2,7 millones de votos totales (de los cuales 2,36 millones fueron válidos en la consulta presidencial y 2,33 millones en la lista al Senado), el Pacto Histórico dio su primer batacazo político en el nuevo ciclo electoral.
En una contienda marcada por una secuencia de cuatro vueltas electorales rumbo a 2026, el bloque progresista logró medir su fuerza en las urnas por primera vez tras tres años de gobierno. El resultado confirma que el Pacto sigue siendo una de las fuerzas políticas más relevantes del país, con capacidad para conservar su peso legislativo y disputar la hegemonía en el bloque de izquierda.
Aunque está claro que para las listas al Congreso en estas elecciones se movieron las militancias políticas de base, la capacidad de incidencia en la opinión de los influenciadores y algunas estructuras políticas a nivel regional, es verdad que el Pacto logra romper el techo de sus propios resultados en 2022 y perfila, al menos, su capacidad de conservar la mayoría de las curules tanto en Senado como en Cámara.
No obstante, la polémica sigue en la construcción de las listas, en la inclusión de figuras cuestionadas y en la capacidad que estas han tenido para movilizar el voto frente a procesos de base, que se han quedado rezagados. El reto para el Pacto Histórico queda servido, especialmente en el voto urbano, que frente a 2022 se redujo considerablemente.
El Pacto Histórico cerró la consulta con una convocatoria significativa que los deja con un buen margen de cara a las elecciones del próximo año. Pero en el Congreso no todo fue una victoria para la izquierda, porque se impusieron políticos con apoyos regionales y los influenciadores.
En la consulta del Pacto Histórico de este domingo no solo se eligió a Iván Cepeda Castro como el representante de ese sector en la consulta del Frente Amplio, sino que también se definió el orden de las listas cerradas, paritarias y ‘cremalleras’ que esperan llevar en las elecciones del Congreso, que serán en marzo de 2026.
La consulta de Senado demostró lo importante que fueron las estructuras políticas tradicionales para el Pacto, porque de los diez aspirantes más votados, al menos cinco llegan con esos apoyos. Y esto, sin duda, deja cierta preocupación sobre un sector de la izquierda.
El candidato al senado más votado fue el actual Senador Pedro Hernando Flórez Porras, quien sacó 185.029 votos. Es el representante del conocido clan Torres en el Pacto y muy cercano al ministro del Interior Armando Benedetti, hubo toda una movida de sus maquinarias en el municipio de Puerto Colombia, el fortín electoral de los Torres en el departamento del Atlántico.
Florez Porras, quien apenas lleva un periodo en el Senado, es químico farmacéutico y antes de 2022 no era conocido en la vida política. Por eso es llamativo que un periodo después sea el más votado en una lista que busca representar a la izquierda.
A Flórez lo siguió el actual congresista Wilson Arias, del Valle del Cauca e integrante de la Comisión Séptima del Senado —la que discute la reforma a la salud—. En este periodo que pasó en el Congreso, Arias tomó mucha fuerza porque fue uno de los defensores de la reforma laboral y, en especial, de los contratos de los aprendices del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena).
El tercero en la lista fue el influenciador Walter Alfonso Rodríguez, conocido en las redes como Wally. Sacó 137.821 votos en su primera aspiración al Congreso y logro una cifra mucho mayor que figuras que están justo en este periodo en el Legislativo. Un resultado que muestra el impacto que tienen las redes sociales frente a la toma de decisiones en política.
El cuarto aspirante más votado fue el actual senador Ferney Silva Idrobo, oriundo de Santader de Quilichao quien sacó 90.045 votos y fue otra de las revelaciones de esta jornada electoral, convirtiéndose en la nueva figura política del Cauca. Se le conoce por su anterior cercanía con el exministro del Interior Luis Fernando Velasco Cháves.
En votos, a él lo siguió otra de las figuras del Pacto que busca repetir: el senador Nariñense Carlos Alberto Benavides Mora, una de las fichas visibles del Polo Democrático.
La sexta figura más votada entre los aspirantes al Senado fue Carmen Patricia Caicedo, hermana de Carlos Caicedo —fundador del movimiento progresista Fuerza Ciudadana y exgobernador del Magdalena—.
Y varios de los siguientes en la lista son fichas cercanas a Daniel Quintero, exalcalde de Medellín y quien se movió para lograr buenos apoyos regionales. Uno de los más votados en la consulta fue el actual representante por el Valle del Cauca, Alejandro Ocampo Giraldo, quien quiere saltar al Senado y es uno de los defensores del exmandatario paisa al interior del Pacto Histórico.
A él lo sigue otras de las fichas que llegó respaldada por Quintero. Se trata de Laura Ahumada, esposa del alcalde de Barrancabermeja, investigado por ganar las elecciones con un presunto entramado de compra de votos. La última de las fichas de Quintero entre los diez es Álex Flórez, actual senador en el Pacto.
Una de las voces más representativas de la izquierda que logró meterse entre los diez más votados fue la senadora Aida Avella, integrante de la Unión Patriótica (UP) y defensora de los derechos humanos.
Las listas serán cerradas, paritarias y cremalleras. Eso quiere decir que se organizarán así: la cabeza de lista se definirá entre el segundo en la consulta, María José Pizarro o La exministra Carolina Corcho quien se disputa desde ahora ese honor y el senador y la senadora más votada. Luego, se intercalarán los aspirantes más votados entre hombre y mujer. Entonces, la lista cerrada tendría estos nombres:
Los diez hombres más votados:
Pedro Flórez
Wilson Arias
Walter Rodríguez
Ferney Silva
Carlos Alberto Benavides
Alejandro Ocampo
Álex Flórez
Agmeth Escaf
Cristián Kevin Gómez
David Racero
Las diez mujeres más votadas:
Carmen Caicedo
Laura Ahumada
Aida Avella
Esmeralda Hernández
Sandra Chindoy
María Eugenia Londoño
Kamelia Edith Zuluaga
Yaini Isabel Contreras
Isabel Zuleta
Deisy Johana Osorio












Debe estar conectado para enviar un comentario.