“Canalero”: Profesión u Oficio…? .Luce la mejor pinta, buena parla y es poliglota.

 

541 vistas.

Por: Álvaro Miguel “El Negro” Mina.

Cómo si se tratara de una plaga, el malquerido e inoportuno personaje de la rumba: “El Canalero”, se toma por asalto los más recónditos parajes de la buena rumba y placer.

Con la facilidad de un “genio” o como si se tratara de un rayo de luz, se aposenta en todo lugar donde se descorche una botella licor o se cocinen tamales, sancocho, o Lechona.

Generalmente culto, bien vestido, bien informado, bailarín y conocedor al detalle del último chisme de moda o del candidato a tal puesto público.

Experto en el manejo de la “coba” y en la quema de incienso, a enamorados o afortunados ganadores de chance y herencias.

Además, para lograr hacer derramar una lágrima a la concurrencia, es el primero en rendir tributo a familiares y personajes fallecidos. Éste ritual lo aprovecha al momento de descorchar la primera tanda, elevando la botella en todo lo alto para lanzar el primer trago por las benditas ánimas del purgatorio.

En ése momento ofrece servilletas, ante la ausencia de pañuelos para secar las lágrimas y ganarse la confianza de los contertulios.

Con los meseros y barman intercambia números de teléfonos, les ofrece chicles, golosinas y empleo con un primo suyo, dueño de un bar en el norte de la ciudad. Y, cómo se tratara de un perro tomando caldo, no le brinda descanso a la sin hueso, pues siempre tiene un apunte, chiste o respuesta a flor de labio, para caer en la nota del momento.

De oído sordo a las críticas, el primero en llegar a las fiestas, bautizos, matrimonios, reuniones sociales, sin llevar regalo y sin invitación. Igualmente después de los padres de familia baila con la quinceañera y muchas veces se ofrece para quitarle la liga a la reciente casada.

A la hora de la comida, ofrece un brindis en agradecimiento a los músicos o el discómano, para perder la vergüenza y el temor a ser excluido de las viandas.

Tomadito de confianza en el evento, con voz de mando le pide a los meseros, que su plato sea con poco caldo y poca ensalada. Sacrificando de paso la guarnición, más no la proteína. Como si fuera poco lo anterior, nunca se emborracha y bebe más que un arco iris, (que me muestren el berraco, que haya o “aiga” logrado dejar bembo a un canalero).

Claro que a la hora de pedir la otra tanda con alevosía y manejo escénico, se ofrece de manera voluntaria y desinteresada para recoger la cara del finado Bolívar, asegurando de paso y de manera esquiniada lo del taxi para su regreso a casa. finalmente está que se ofrece cómo conductor elegido, así le toque al otro día cepillarse con el cepillo de las visitas.

Cuando se le convoca para armar la (vaca), frota la lámpara de Aladino y desaparece.Al regresar lo hace sonriente asegurando, qué fiesta y amigos cómo éstos ni en Themu, se consiguen.

Sería muy bueno que ahora, qué por la inseguridad se debaten medidas de control cómo: “ley seca y toque de queda”, nuestros dirigentes prohíban al canalero por decreto para alejarlo de la rumba.

Claro está que “El Negro” Mina y el periódico La Última, consultaron la opinión de Marino Millán y el “Pepeson” Gonzáles, dos operarios permanente de la rumba caleña, sobre éste mal necesario:

“El trago es venerable, lo malo de la rumba es el bendito canalero, no da tregua, ni plata. Eso sí salva la noche porqué generalmente sabe dónde permanecen las muchachas de tobillo grueso, por sus largas jornadas de pie”.

Marino Millán.

“El canalero, es necesario porqué es el quién motiva a la gente, es el verdadero influencer y además tiene el número de las señoras de la noche y las direcciones de las ventas de comida. Así cómo el digito del Chance y loterías”.

“Pepe”González.

Y, no olvide que el (canalero) amigo, es aquel que no le permite empeñar la argolla de matrimonio, para comprar licor. Él te convencerá de venderla, argumentando que al momento de beber, no es saludable pensar en la mujer.

Al cierre de ésta edición el querido, Héctor Fabio Torres “Etorry” ex coordinador de redes de Emcali, y Gerente de “Etorry Stereo” aseguró que “El propio Canalero, goterea más que una carga de queso al sereno y sufre permanentemente de insomnio”.

Redacciòn