El uniformado, oriundo de Córdoba, solo llevaba dos meses en la institución. Fue atacado a tiros por sicarios en moto mientras acompañaba la ceremonia religiosa.
Durante la jornada del Sábado Santo, en medio de una procesión en el municipio de Lourdes, Norte de Santander, fue asesinado el patrullero de la Policía Nacional, Andrés David Padilla Mejía.
Hombres armados que se movilizaban en una motocicleta dispararon en múltiples ocasiones contra el uniformado de 28 años mientras acompañaba a la comunidad en los actos religiosos de Semana Santa este 19 de abril.
Aunque fue trasladado de inmediato a un centro asistencial de Lourdes, y luego al municipio vecino de Gramalote, falleció debido a la gravedad de las heridas, según el reporte de la Policía.
El general Carlos Fernando Triana, director de la Policía Nacional, confirmó el crimen contra el patrullero y anunció la conformación de un equipo especial de investigación criminal para dar con los responsables.
“Condenamos la acción criminal que segó la vida de nuestro patrullero en momentos en que acompañaba a los feligreses. Toda nuestra solidaridad con su respetada familia, con el compromiso institucional de llevar a los asesinos ante la justicia”, expresó el alto oficial.
Padilla Mejía era oriundo de Cotorra, Córdoba, y había iniciado su carrera en la Policía el pasado 21 de febrero de 2025, en el Departamento de Policía de Norte de Santander.
A pesar de su corta trayectoria, el uniformado ya había sido condecorado por la Alcaldía de Lourdes por su destacada labor en seguridad y convivencia ciudadana, según informó el general Triana.
Las autoridades han establecido una recompensa de 100 millones de pesos para capturar a quienes asesinaron al uniformado cordobés Andrés David Padilla Mejía, que custodiaba la procesión del Sábado Santo en el municipio de Lourdes, Norte de Santander.
Este ataque se suma a una escalada de acciones violentas en diferentes zonas del país durante la Semana Santa.
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