El excombatiente de las FARC Jhon Mario Chantre Banguero conocido como «El escamoso» fue asesinado por desconocidos en el barrio Villa del Rosario de Corinto, en el convulso Norte del Cauca, y se convirtió así en la décima víctima mortal este año de la violencia contra los exguerrilleros que dejaron las armas.
El Consejo Nacional de Reincorporación (CNR) de Comunes, el partido surgido de la desmovilización de las FARC, señaló que el crimen fue cometido la noche del miércoles cuando Chantre Banguero visitaba a su madre en Corinto.
“Él era integrante de la Cooperativa Multiactiva Agroambiental de Corinto”, agregó el CNR, que manifestó que ya había alertado del riesgo que tenía este firmante de paz en esa zona del Cauca que está dominada por la facción más beligerante del Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las FARC.
Para el CNR de Comunes, con asiento en el Congreso de la República “la reincorporación no puede darse en contextos de riesgo e incertidumbre” y por eso hizo un llamado a las autoridades para “fortalecer las medidas de protección que no solo brinden seguridad física, sino que también garanticen acceso a derechos, estabilidad económica y sostenibilidad en los proyectos de vida”, en medio de la creciente inseguridad y violencia en el departamento del Cauca y todo el país.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) denunció que el frente Yair Bermúdez, una disidencia que se separó del EMC, buscaba reclutar a Chantre.
Entre tanto, la columna Dagoberto Ramos, otra disidencia de las FARC, lo acusaba de colaborar con el frente Yair Bermúdez que también delinque abiertamente en la región.
“Se presume que el incremento de los homicidios de firmantes en esta zona puede obedecer a esta dinámica”, agregó Indepaz.
Sin embargo, la situación más crítica para los firmantes de paz sucede en la zona del Catatumbo por los enfrentamientos entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Frente 33 de las disidencias de las FARC, que desde el 16 de enero han dejado al menos 57 muertos y más de 50.000 desplazados, según datos oficiales.
Por su parte el Ministerio de Defensa asegura además que ocho firmantes del acuerdo de paz, a los que el ELN acusa de ser miembros del Frente 33 de las disidencias, están desaparecidos, mientras que seis de ellos fueron asesinados.
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