América se haría responsable de los daños y autoridades ofrecen recompensa para capturar vándalos del Pascual Guerrero.

La Policía Metropolitana de Cali confirmó que son ocho los heridos tras los actos de violencia que se presentaron en el estadio Pascual Guerrero de Cali, pero la cifra de lesionados llegaría a 30. El alcalde pidió judicializar a los responsables y anunció una recompensa millonaria para identificarlos.

Pese a que, días antes, en la Comisión Local del Fútbol, los hinchas de las barras del América de Cali se habían comprometido a tener un buen comportamiento y a disfrutar de la final de la Copa BetPlay en paz  y la  Policía Metropolitana había recomendado realizar  el encuentro  a  puerta  cerrada los hechos de este domingo en el estadio Pascual Guerrero evidenciaron la falta de palabra de los vándalos y delincuentes  disfrazados de hinchas haciendo todo lo contrario.

De acuerdo con reportes preliminares, varios comercios, especialmente establecimientos de licor y fuentes de  sodas, restaurantes de  comidas  rápidas, fueron vandalizados, y se registraron robos de vehículos en las cercanías del estadio ubicado en el barrio San Fernando . Además, se presentó una confrontación entre algunos integrantes de las barras del América y la Policía  a pocas cuadras  del escenario deportivo en donde fue hurtada  una  pistola de dootación  una  patrullera, por quienes  antes intentaron ingresar de manera violenta a la gravilla del estadio.

De acuerdo con el coronel Carlos Oviedo, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, “algunos integrantes de las barras del América de Cali pretendían ingresar de manera violenta a la gramilla del estadio. Personal de la Unidad Nacional de Mantenimiento del Diálogo actuó y evitó que ellos llegaran hacia la cancha, se presentó una confrontación”, señaló el oficial.

 

El comandante de la Policía Metropolitana agregó que además de los heridos, los hechos también dejaron “daños materiales en el estadio”  con más  de 600 sillas e  infraestructura de los baños sanitarios y recordó que, días antes, “en la Comisión Local del fútbol, se había acordado un compromiso de los líderes de estas barras para disfrutar este evento deportivo en paz, en convivencia, pero desafortunadamente no fue cumplido”. Por lo que, indicó, ya se están adelantando acciones para identificar a los responsables y judicializarlos  ante la Fiscalía.

El Club América  de  Cali con sus pólizas y como equipo  local se haría  responsable  de los  daños y asumirá  los  gastos  de  las  reparaciones locativas  y  dotación del Estadio

“Se ha nombrado un grupo de la Seccional de Investigación Criminal para que a través de recolección de elementos de material probatorio, de verificación de cámaras de circuito cerrado, se pueda identificar a estas personas que causaron los desmanes”, concluyó el coronel Oviedo al tiempo que  se  dispondrá  de un bloque de búsqueda  para perseguir  y capturar los  delincuentes.

Así mismo, el mandatario  de los Caleños Alejandro Eder anunció una recompensa de hasta 30 millones de pesos a quien brinde información sobre los responsables de los actos violentos.

“Ofrecemos una recompensa de hasta $30 millones a quien brinde información que permita identificar y judicializar a cada uno de los responsables de los actos violentos en el Pascual Guerrero. ¡No permitiremos que estos hechos queden impunes! Comuníquese a la línea multicrimen 3143587212 o con la Policía Metropolitana de Cali”, agregó el alcalde Alejandro Eder. 

Así mismo, Eder  Zambrano, hizo un llamado a la Comisión de Fútbol a que “se apliquen sanciones ejemplarizantes para las barras responsables. El fútbol debe ser una fiesta para las familias, no un escenario de vandalismo y agresión”.

Este nuevo grave incidente resalta una vez más el problema de la violencia en el fútbol colombiano. Los disturbios en el Estadio Pascual Guerrero no solo interrumpieron un importante partido, sino que también mostraron el descontrol de algunos hinchas que bajo el consumo de  alucinógenos y alcohol, usando pólvora, siguen poniendo en peligro la seguridad de los jugadores, árbitros y espectadores.

Desde  la  Secretaría se  Seguridad y Justicia de Cali se publicó en  las últimas  horas  los carteles con los rostros de quienes serían los presuntos protagonistas de los disturbios y actos vandálicos  en el Estadio Pascual Guerrero.

El hecho genera preocupación sobre la falta de control y medidas efectivas contra la violencia en los estadios, en tanto desde el ministerio de  Interior se  anunción que a partir  del 2027, los  Clubes Deportivos  deberán «meterse  la mano al Dril» y  hacerse  cargo de  la  vigilancia interna de los  estadios  en  cumplimiento de una  sentencia de la  Corte Constitucional.

 

 

 

 

Redacciòn