Investigadores reunidos en la COP16 refuerzan el llamado a luchar contra las economías ilegales para proteger el medio ambiente.

 

Los expertos advirtieron sobre la urgencia de fortalecer los mecanismos que permitan enfrentar las economías ilegales y de esta manera evitar sus graves afectaciones sobre la naturaleza.

La advertencia se suma a la propuesta del Alcalde de Cali  Alejandro Eder, del pasado 26 de octubre, en la que pidió a sus pares del mundo la creación de una coalición para que los gobiernos locales endurezcan las medidas contra las economías ilícitas para poder cuidar la biodiversidad.

El alcalde Eder argumentó que “es en las ciudades donde enfrentamos los retos más graves. Las economías ilegales, porque son las mayores destructoras de nuestra biodiversidad: la minería ilegal, la industria de la cocaína y la crisis migratoria son una amenaza real y están devastando nuestras regiones, están destruyendo nuestros ecosistemas y robando el futuro de nuestras comunidades”.

En la recta final de la COP16, el evento ambiental más importante del mundo que se realiza en Cali, los expertos lanzaron un llamado de urgencia para avanzar en el fortalecimiento de los mecanismos de lucha contra las economías ilegales para poder proteger la biodiversidad del planeta.

Durante el Encuentro Global sobre Conservación: Desafíos y Soluciones frente a Economías Ilegales, coordinado por Parques Nacionales Naturales de Colombia y la Universidad Javeriana de Cali, los investigadores debatieron cómo la minería ilegal y otras actividades ilícitas afectan las áreas protegidas a nivel global.

A través del intercambio de experiencias y colaboración internacional, se puso sobre la mesa la necesidad de buscar soluciones innovadoras y estrategias efectivas para salvaguardar la biodiversidad y la conservación de nuestros recursos naturales.

El reto de cuidar la naturaleza y enfrentar las acciones ilícitas.

Héctor Fabio Gómez Botero, jefe del Parque Natural Nacional Farallones de Cali, explicó que “nosotros ejercemos como autoridad ambiental y es bueno que los ciudadanos entiendan que la minería está prohibida en estos territorios de conservación ecológica. Dentro del sistema de Parques Nacionales la minería es una actividad totalmente ilegal”.

“Somos un área de importancia para la conservación de la biodiversidad del mundo pero estamos hablando de situaciones complejas para los gestores de áreas protegidas, para los guardaparques porque es difícil llegar a un lugar de vital importancia ecológica y encontrarse con los actores de una economía ilegal. Tenemos ese reto, porque además de los trabajos de restauración y de comunitarios debemos enfrentar estas situaciones como, por ejemplo, la minería ilegal”, agregó Gómez Botero.

Por su parte, Juan Manuel Guzmán López, experto de Parques Nacionales Naturales Colombia, explicó que “hablando de economías ilegales, dentro del Parque Nacional Farallones de Cali, hemos encontrado actualmente dos tipos de minería, una que utiliza explosivos y otra mediante socavones, que afectan riesgos ambientales que entre otros contaminan los ríos con metales pesados como el mercurio, plomo y arsénico. Además, tenemos la presencia de personas armadas que dificultan bastante el desarrollo de nuestra actividad de protección del medio ambiente”.

Control policial y trabajo social en áreas de conservación

Los expertos insisten en que no se puede bajar la guardia y que se debe avanzar en los mecanismos de lucha contra las economías ilícitas que afectan los ecosistemas, pero Guzmán López resaltó que “se viene trabajando. Tenemos comités de trabajo interinstitucional y desde allí trabajamos en el componente policial para ejercer control y en el componente social para trabajar con todas las personas que han sido instrumentalizadas por estas actividades ilegales y darles alternativas para que tengan un ingreso para vivir dentro de la legalidad”.

Sobre esta relación entre la pobreza y las economías ilícitas en las áreas de conservación natural, el director de recursos naturales y evaluación de recursos naturales del territorio del Ministerio de Ambiente de Perú, Jesús Flórez, recalcó que “hay que entender que las personas quieren elevar su nivel de vida y salir de la pobreza. Evidentemente no podemos seguir pensando en conservación si no atendemos a las personas que padecen la pobreza y que para poder sobrevivir también realizan actividades ilícitas que atentan contra la naturaleza, y la minería ilegal artesanal en áreas protegidas muchas veces es la expresión clara de eso”.

Flórez aclaró que hay que tener en cuenta que también existe la minería a gran escala y que en este sentido “necesitamos avanzar en un sistema de monitoreo, mirar cómo podemos planteamos un sistema de monitorio que nos permita en tiempo real poder saber dónde se está realizando la minería ilegal, y a qué dimensión, para llegar con mucha más rapidez e implementar medidas preventivas”.

 

 

 

 

 

 

 

 

Redacciòn