El Ministerio de Relaciones Exteriores anunció para tranquilidad de los colombianos que se acercaron a las oficinas de documentos oficiales para sacar sus visas y pasaportes, que se ha firmado un contrato que garantiza la operación de ese servicio con toda normalidad por lo menos durante el próximo año.
La solución ha sido planteada por la Cancillería tras revelar que se ha renovado por un año un contrato con la compañía Thomas Greg and Sons, la misma empresa que perdió la licitación pasada y que anunció que demandaría al Estado por no adjudicarle el contrato aún tras obtener el máximo puntaje.
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El nuevo contrato se firmó en la tarde de este 2 de octubre y es por 12 meses con lo que se garantiza la continuidad del servicio. Así las cosas, el Gobierno del presidente Gustavo Petro logró firmar ese documento apenas el mismo día que finalizaba el contrato con Thomas Greg, un retraso que alcanzó alertar al país con una escasez y desabastecimiento de visas y pasaportes.
Como es bien sabido, la licitación por casi medio billón de pesos –599.000 millones en total– terminó frustrada porque al final del proceso solo llegó Thomas como compañía oferente.
Tras múltiples denuncias por supuestas condiciones que beneficiaban a esa multinacional, el propio presidente Petro ordenó declarar la licitación desierta e iniciar una nueva desde cero que garantizara la competencia y la diversidad de oferentes.
El canciller Álvaro Leyva Durán había declarado desierto el proceso licitatorio y decretó una “urgencia manifiesta” que le permitió al Gobierno adjudicar un contrato por 12 meses de manera directa mientras se realiza el nuevo proceso y firmar un contrato que irá hasta octubre de 2024 con lo que se garantiza que todos sus servicios de visas y pasaportes seguirán funcionando de manera idéntica a como lo venía haciendo durante las últimas dos décadas.
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