Apuesto Venezolano con pinta de Arabe es el «vendedor estrella» de Severo Sinvergüenza en Cali

 

Tras las  filas de  miles de Caleñas para ingresar  al establecimiento que vende sus waffles con forma de penes y vaginas, las autoridades recomendaron al próspero negocio seguir vendiendo sus apetecidos productos con una serie de condiciones y cuya vendedor estrella es  Ray Cabrera  un «apuesto» venezolano  con pinta de «árabe» de  27 años y seis años viviendo en Colombia.

Por  ejemplo se  acordó que la venta postres y comida con un toque sexual a quienes visitan este lugar, con insinuaciones de experiencias eróticas, aunque sea por unos minutos, en adelante deben tener  los vidrios del establecimiento polarizados, de acuerdo a lo establecido por la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali – A.P.I. de  la Alcaldía, a  fin de no generar escándalos con menores  de edad.

Esta intervención de la Secretaría de Seguridad de Cali se  dio luego de la polémica suscitada el fin de semana por unos videos que circularon en redes sociales donde se veía escenas “subidas de tono” que se llevaron a cabo en el establecimiento “Severo Sinvergüenza», estableciendo algunas normas para que este siga funcionando.

Una de ellas, es que se deberá prohibir el ingreso de menores de edad, así como también polarizar el vidrio del restaurante, para evitar que desde el exterior se vea la temática del sitio y prohibir el exhibicionismo.

Además, quedaron prohibidos los golpes y cachetadas entre quienes atienden el establecimiento y los clientes. Finalmente, en el lugar también se deberá señalizar y controlar sobre el comportamiento que deben tener todas las personas que visiten el lugar, tal como lo reconvino el Secretario de Seguridad, Jimmy Dranguet, quien aseguró que se debe mantener el respeto por la ciudadanía.

«Hemos visto los videos y son bochornosos, no es la Cali que queremos representar. Si el establecimiento no cumple la normativa correspondiente, será sancionado, este tipo de actividades con actos obscenos no se pueden realizar”, aseguró.

El funcionario añadió que este establecimiento, al tener una vitrina de cristal que permite ver hacia adentro, expone a niños y niñas a actos que rayan en la obscenidad.

“Envío un mensaje a los empresarios y la ciudadanía para que tenga en cuenta que hay lugares, horarios y formas de ejercer una actividad con un contenido sexual, sin que vulnere los derechos de nuestros niños, niñas y adolescentes”, complementó Dranguet.

Redacciòn