Repudio en Cali por mensaje de médica que invita a «matar mil indios»

Una grave denuncia fue presentada por Noticias Uno este sábado 15 de mayo. En un grupo de WhatsApp, una conocida médica ortopedista escribió: «…Dan ganas de que vengan las autodefensas y acaben literalmente con unos 1000 indios, así poquitos nada más para que entiendan… yo supiera dónde tengo que dar la plata para que esto pase, allá voy volando, si alguien sabe me avisa».

Este mensaje ha causado indignación, repudio y rechazo por parte de toda la comunidad. Más teniendo en cuenta la situación actual de Cali (ciudad de origen de la médica) donde hace algunos días se registraron incidentes con la Minga Indígena, que ya no se encuentra en la ciudad.

El medio de comunicación que presentó esta denuncia, se contactó con la prestigiosa galena Juliana Rojas  Neira, ortopedistas y Tarumatóloga y ella respondió con un comunicado y en uno de los puntos decía: «La información contenida en esa captura de pantalla, esto es, mi nombre y número de teléfono móvil fueron divulgados in mi consentimiento y además vulnerando la expectativa de privacidad de información en el contexto de un grupo de mensajería instantánea compartido con compañeros de profesión».

La Clínica Imbanaco finalizó de manera unilateral el contrato que tenía con una médica debido a la controversia y rechazo que ha generado un comentario que hizo sobre las comunidades indígenas en un grupo de WhatsApp.

«En atención a los hechos recientes, la Junta Directiva y la Gerencia General, con el apoyo y acompañamiento del Comité de Ética de la institución, después de un análisis responsable de los hechos, ha tomado la decisión de finalizar de manera unilateral el contrato que media la relación con una médica adscrita de la cual nos reservamos el nombre por razones de seguridad, toda vez que no representa los valores y el actuar de nuestra organización», dice la Clínica en un comunicado divulgado este domingo.

Además del rechazo que generó el mensaje, este domingo se reportó un grafiti en las instalaciones de la Clínica Imbanaco y amenazas contra la profesional implicada y contra la institución a través de redes sociales.

Por ende, la Clínica enfatizó que «contamos dentro de la institución con un Código de Ética, Conducta y Régimen sancionatorio en donde se estipula que ningún grupo de interés, sean proveedores, accionistas, empleados o prestadores de servicios de salud podrá discriminar o favorecer a los pacientes en razón a su filiación política, credo religioso, etnia, raza o preferencia sexual, por lo tanto nuestro deber es prestar a toda la comunidad una atención humanizada y de excelencia».

 

Redacciòn