Ha finalizado con total éxito la XXI versión del Festival Petronio Álvarez demostrando que es el evento de mayor reconocimiento a la cultura del Pacífico colombiano y que ha logrado posicionarse en el contexto nacional e internacional porque recoge, reconoce, valora, respeta y promueve la cultura del litoral del suroccidente, ubicando a Cali como una ciudad multicultural e incluyente, ratificando de paso su posición natural de “Capital de Pacífico Colombiano”.
De ello no cabe duda y son testigos los 90mil asistentes diarios que disfrutaron sin contratiempos e incidentes con un sorprendente buen comportamiento que permitió el fortalecimiento de este proceso cultural y haciéndolo participativo, democrático e incluyente, velando por demás con un correcto uso de las manifestaciones artísticas y culturales de las costumbres y tradiciones de las regiones del litoral pacífico colombiano.
Y gran parte de este éxito este año se debe al apoyo irrestricto que el gobierno municipal de Cali en cabeza de su alcalde Maurice Armitage Cadavid le brindó al certamen en el que se pudo apreciar una buena dosis de inclusión social en la capital del valle , pues fue evidente que se está viviendo un proceso de mejorar las condiciones de las personas y los grupos afros, para que formen parte de la sociedad vallecaucana, mejorando la capacidad, las oportunidades y la dignidad humana , las cuales han sido tradicionalmente personas desfavorecidas debido a su identidad.
Los negros de cali, el valle y el pacífico colombiano ya han entendido que la sociedad y las autoridades están asumiendo como un imperativo moral abordar la exclusión social y que si no se enfrenta, esta exclusión de una raza que ha sido históricamente marginada puede ser muy costosa, y es muy probable que los costos —ya sea sociales, políticos o económicos— lleguen a ser considerables.
Quedará en la retina de los caleños aquella noche en la que el Alcalde Armitage destacó que en su gabinete gubernamental cuenta con brillantes funcionarios negros que le ayudan a administrar la ciudad , dejando entrever con cierto orgullo que esta situación es parte de la admiración y respeto que siempre ha manifestado por los afros , enseñando de paso que a todos los ciudadanos sin excepción, puedan ejercer sus derechos, aprovechar sus habilidades y tomar ventaja de las oportunidades que se les ofrece en su medio.
No se puede desconocer que el mandatario de los Caleños ha mostrado querer gobernar con la inclusión social de la población negra con prominentes dirigentes que también han entendido que integrar a la vida comunitaria a todos los miembros de la sociedad, independientemente de su origen, condición social o actividad, en definitiva es acercarlos a una vida más digna, donde pueda tener los servicios básicos para un desarrollo personal y familiar adecuado y sostenible.
Lo que ha hecho Armitage en cali es incluir a los negros del pacífico que siempre han sido excluidos, dejándoles que participen pasiva y activamente mediante una ampliación indefinida de la ciudadanía hacia una sociedad en la cual los derechos sociales, económicos y culturales sean aceptados y de uso cotidiano entre los caleños.
No se puede desconocer que estos excelentes “afro-funcionarios”, pueden ir abriendo el camino de alguna manera para mejorar las medidas de inclusión como las acciones afirmativas que permitan el ingreso masivo de profesionales negros competentes en todos los niveles de la administración pública.
Sin embargo falta mucho para que la discriminación étnico-racial en nuestra propia región deje de ser un problema que afecta gravemente a la sociedad vallecaucana, pues contribuye a acentuar la desintegración nacional, profundiza la pobreza e incrementa la exclusión social, impidiendo un desarrollo basado en la igualdad.
Debe estar conectado para enviar un comentario.