Este viernes, el ex presidente y actual senador de la República Álvaro Uribe Vélez ofreció excusas públicas en la Corte Suprema de Justicia a las madres de Soacha, por el mensaje que difundió a través de Twitter que se refería a que los jóvenes asesinados extrajudiciales estaban involucrados en «actividades ilegales».
El 25 de julio de 2015, Uribe Vélez escribió: «En reunión con las Madres de Soacha varias me expresaron que sus hijos estaban infortunadamente involucrados en actividades ilegales, lo cual no es excusa para asesinarlos, pero la hipótesis no fue examinada por la justicia”.
Después de casi dos años, las madres de Soacha le exigieron retractarse de esa acusación.
«Aceptó la solicitud de las señoras madres de mencionar expresamente a sus hijos asesinados, todo con el propósito de respetar su memoria, entre ellos un menor de edad y un joven con discapacidad mental», reconoció el jefe del Centro Democrático.
Por solicitud de las mujeres, el senador mencionó a los jóvenes que el Ejército reportó como muertos en combate. La Fiscalía ha señalado que fueron jóvenes humildes de Soacha, Cundinamarca.
«Leonardo Porras Bernal, Jaime Steven Valencia Sanabria, Leonardo Triana Carmona, Óscar Alexánder Morales Tejada y los demás que hubieren sido asesinados en las mismas circunstancias», leyó Uribe Vélez.
El ex presidente Uribe Vélez llegó puntual a la Corte Suprema para la audiencia de conciliación por sus ofensas a las madres de Soacha.
Era su última oportunidad para pedir perdón a las 4 madres de Soacha demandantes: Lucero Carmono, Maria Doria Tejada, María Sanabria y Luz Marina Bernal.
A la audiencia pasada Uribe no se presentó, y hoy no comparecía públicamente y les pedía perdón por haberlas llamado “madres de guerrilleros” sin consideración de su dolor por el asesinato de sus hijos por miembros de las Fuerzas militares deberá enfrentar además de un proceso penal, reconocerles una indemnización y pagar avisos en medios nacionales.
Uribe se presentó pero no entró por la puerta pública, sino que logró que lo hicieran pasar por la puerta privada de los magistrados. Después de 3 horas en la audiencia, el ex presidente salió ante las cámaras y tuvo que reconocer por segunda vez que las afirmaciones que ha hecho no son ciertas.





Debe estar conectado para enviar un comentario.