A través de decreto firmado el 25 de noviembre de 2016, la Administración de Timbío, en Cauca, prohibió los piropos en las calles y veredas de este municipio.
Según el alcalde Libardo Vásquez Manzano, se busca inculcar el respeto a las mujeres, así como prevenir diferentes tipos de violencia contra las mismas.
Lanzar un piropo, silbarle o expresar alguna frase de mal gusto hacia una mujer será sancionado en Timbío, una población del Cauca a 15 minutos de la capital Popayán, en la que su alcalde expidió un decreto castigando estos comportamientos.
Si bien no se tratan de sanciones de cárcel o de multas económicas, la alcaldía de Libardo Vásquez establece correctivos pedagógicos, por medio de señales que se instalaron en seis puntos de la población.
Dichas señales contienen mensajes como “Eso que tu llamas piropo es acoso callejero y agrede e intimida a las mujeres”. Los puntos fueron seleccionados como los más propensos para este tipo de comportamiento.
Se trata de la plaza de mercado, en el sitio donde se ubican los taxistas y conductores, el terminal de transportes, el parque central, la cancha de fútbol y en inmediaciones de la Policía.
Piropo es una frase ingeniosa que se lanza a una persona para adular, con el propósito de cortejarla o enamorarla. Si bien esto es muy común entre los hombres hacia las mujeres, también se da en el caso recíproco (de mujeres a hombres) pero en mucha menor medida.
El uso más habitual y popular del término piropo es aquel que refiere al cumplido que un individuo le dirige a otro, aunque por supuesto las mujeres también se los hacemos a los hombres resulta ser mucho más frecuente que los hombres le dirijan un cumplido, un piropo, a la mujer que aman o que quieren conquistar.
Por tanto es que el contenido del piropo siempre ahondará en alguno de los aspectos destacados con los que cuenta la persona a la cual se lo dirige, por ejemplo si se caracteriza por su dulzura y esto es lo que más le gusta al piropeador, seguramente, el piropo tendrá que ver con ello, por ejemplo, «que habrá pasado en la bombonería que dejaron escapar a los bombones…»
“Pero no siempre el amor o la admiración son las razones de un piropo, porque también suele suceder que el piropo que se menciona con frases prosaicas y groseras que de alguna manera lesionan la dignidad y el respeto que se merecen las mujeres” señaló el mandatario local de Timbío.
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